Hay miradas que besan todos los rincones del alma...

Hay miradas que besan todos los rincones del alma...

miércoles, 28 de diciembre de 2011

Pequeños placeres III


-Los conciertos, y dejarte la voz en ellos.
-La risa contagiosa.
-Las cosas antiguas.
- Quitarme las zapatillas con los pies y con los cordones puestos.
-Dejar que tu mirada se pierda buscando a alguien, y descubrir que te estaba mirando.
-Sentir el suave roce de su mano en la tuya de manera inesperada.
 - Reír hasta que te duele todo el cuerpo.
-Calentar las sábanas con el movimiento del cuerpo.
- Dejar la punta del rotulador apoyada un rato sobre el papel y ver como la manchita va creciendo.
- El sonido de una grapadora al grapar.
- Que te pongan motes cariñosos.
- Ver como se mueven un montón de motas blancas cuando se cuela un rayo de sol por la ventana.
- El olor de los libros nuevos.
- Escuchar la voz de esa persona.


martes, 27 de diciembre de 2011


No olviden que a pesar de todo lo que les digan, las palabras y las ideas pueden cambiar el mundo... Les contaré un secreto: no leemos y escribimos poesía porque es bonita. Leemos y escribimos poesía porque pertenecemos a la raza humana; y la raza humana está llena de pasión. La medicina, el derecho, el comercio, la ingeniería... son carreras nobles y necesarias para dignificar la vida humana. 

Pero la poesía, la belleza, el romanticismo, el amor son cosas que nos mantienen VIVOS.

jueves, 22 de diciembre de 2011


No soy perfecta, lo sé. Hablo mucho, hago poco. Soy una neurótica, variable y supersticiosa que se juega la suerte con la cara y cruz de una moneda. Puedo ser cabezota, muy cabezota, orgullosa, celosa, gritona, caprichosa, infantil, bipolar, cariñosa, risueña, soñadora, impredecible e impar. Soy DIFERENTE si me conoces. Me encanta la lluvia cuando estoy en la playa y el frío si tengo mantas. Me gustan los besos en la nariz y las miradas transparentes. Me equivoco tantas veces como decisiones tomo. pero cuando quiero, quiero, y cuando no quiero, no quiero. No me dejo querer por cualquiera.

lunes, 12 de diciembre de 2011

¿Temor o... esperanza?


¿Alguna vez echas de menos mi sonrisa? Yo la tuya, de vez en cuando. ¿Tienes alguna vez tiempo para pararte a pensar? ¿Te has emborrachado alguna vez tanto para que todas las luces te parezcan estrellas? ¿Alguna vez te has hinchado a llorar? Yo lo hago de vez en cuando. Todo el mundo se está volviendo verde, ahora que por fin éramos rojos. Todo lo que hemos dicho y hecho, lo hicimos y dijimos demasiadas veces. No te creerías la de veces que temo girar la esquina por si te encuentro al hacerlo, pero no, cuando lo hago nunca estás...